Sexología
Sexología
La sexología genera la polémica sobre si constituye o no una corriente teórica separada. Incluso a su alrededor genera discusiones si cuando aborda diferentes problemáticas de índole sexual, se refiere solo a aspectos genitales, o si trata sintomatologías desconociendo otras cirscuntancias. También se acusa a la sexología de convertirse en una formación publicitaria al promocionar una terapéutica solo desde un síntoma (el que acontece a un paciente). La polémica no es ajena a las polémicas que involucran al campo psi en general. Lo concreto es que la sexología presenta importantes desarrollos en todo el mundo.
Referentes Teóricos
Actualmente dos son las ramas principales que involucran a la Sexología. Por un lado se la ubica desde una lectura comportamental, y desde el otro, bajo una enfoque sistémico.
Históricamente cabe situar a la fase europea (Havelock Ellis, Iván Bloch, Magnus Hirschfel) y la fase norteamericana (Alfred Kinsey, Masters y Johnson).
Sexología, educación sexual, terapia sexual
La Sexología es la disciplina que estudia y trata de hacer inteligible el hecho sexual humano y sus manifestaciones. El defecto de haber tomado a la Sexología como una psicopatología sexual ha traído consigo una patologización excesiva y menor consideración de uno de sus axiomas: en el hecho sexual se dan más variedades cultivables que trastornos curables.
De ahí el interés prioritario de la "educación sexual", entendiendo por tal una educación de los sexos para el conocimiento y la comprensión de estas manifestaciones que son más variedades cultivables que trastornos curables. La educación sexual necesita ser tomada en serio y a fondo, desde su misma raíz: no como una asistencia técnica sino como una contribución a la comprensión del hecho sexual en los sujetos. De ahí que sus temas centrales y sus objetos de interés sean precisamente los que se desprenden de su tronco central, el hecho de los sexos, y no fenómenos al margen o periféricos, por muy urgentes o alarmantes que éstos se presenten.
De la misma manera que la educación sexual, o sea, de los sexos consiste en proporcionar datos y conocimientos de los sexos, la terapia sexual desde su fundación por Masters y Johnson ha sufrido una tergiversación alarmante dejando de lado su aportación más central: la de ser terapia de los sexos.
La Sexología ha tratado, pues, de profundizar en las claves de la educación y la terapia sexual desde su marco teórico y por eso es importante señalar otra de sus grandes aportaciones: frente al abundante recurso a los criterios diagnósticos de los manuales de diagnóstico (por ejemplo el DSM-IV), como mapa de las enfermedades mentales, la Sexología ofrece su propio mapa general desde el cual comprender y explicar hecho sexual humano y sus muchas y variadas manifestaciones. Éste es su potencial epistemológico.
Estudiar Sexología y hablar de sexo son cosas diferentes. La Sexología no es una moral sino una disciplina.